Las innovaciones de los vehículos eléctricos pueden frenar el crecimiento de la demanda de cobre
El fabricante de automóviles EV Tesla (NASDAQ: TSLA) y sus competidores están adoptando avances de ingeniería destinados a aumentar la eficiencia en sus automóviles, reduciendo así el contenido de cobre, según informó Reuters.
Estos desarrollos pueden restringir el aumento de la demanda del metal a medida que la próxima generación de vehículos eléctricos llegue al mercado, según expertos de la industria.
A pesar de un aumento significativo en las ventas de vehículos eléctricos, atribuido principalmente al crecimiento de China, se espera que la demanda de cobre continúe aumentando durante el resto de la década.
Sin embargo, las innovaciones en los vehículos eléctricos se presentan como un posible factor limitante de la demanda, según dos pronósticos recientes.
Menos cobre por vehículo
El cobre se ha considerado durante mucho tiempo un elemento clave de la transición hacia la energía verde, en gran parte debido a su amplio uso en el cableado de los automóviles eléctricos.
Un vehículo eléctrico puede utilizar hasta 80 kilogramos de cobre, un marcado contraste con los 20 kilogramos que normalmente se utilizan en un vehículo con motor de combustión convencional.
Un informe reciente de Goldman Sachs (NYSE: GS) reveló que los vehículos eléctricos representaron dos tercios del crecimiento de la demanda mundial de cobre el año pasado.
Sin embargo, los fabricantes de vehículos eléctricos y baterías han descubierto métodos para reducir el peso y el costo, por lo que requieren menos cobre por vehículo, afirmaron Goldman Sachs y la consultora CRU Group en informes separados.
Predicciones revisadas
CRU Group revisó su predicción para el uso de cobre en un EV promedio a 51-56 kilos entre 2023 y 2030, una disminución de su pronóstico anterior de 65-66 kilos para el mismo período. Goldman Sachs se hizo eco de un sentimiento similar, prediciendo que el contenido de cobre en un EV promedio caería a 65 kilos para 2030, en comparación con su estimación anterior de 73 kilos.
Ambas instituciones atribuyeron esta disminución a una serie de modificaciones de ingeniería destinadas a mejorar la autonomía, reducir el peso y mejorar la eficiencia de los vehículos eléctricos, lo que en conjunto dará como resultado una reducción del contenido de cobre.
Robert Edwards, analista de CRU Group, insinuó una posible ruptura en la narrativa de la demanda de cobre y afirmó: “Algunas de las proyecciones han sido muy agresivas en términos de demanda potencial de energía verde para el cobre”.
Baterías más compactas
Las adaptaciones de ingeniería incluyen la transición a baterías más compactas que no requieren cableado de celda a módulo, el empleo de láminas de cobre más delgadas en las celdas de la batería y la migración a sistemas de mayor voltaje que requieren menos cableado.
En un caso notable, Tesla anticipa que al adoptar un sistema de 48 voltios para su batería secundaria en futuros vehículos eléctricos, la necesidad de cobre podría reducirse a una cuarta parte del requisito actual, informó el CEO Elon Musk a los inversionistas en mayo.
Goldman Sachs identificó estos desarrollos innovadores de baterías y las posibles transiciones a sistemas de mayor voltaje como “la principal amenaza para el apalancamiento de la demanda de vehículos eléctricos de cobre”. La institución pronostica que la demanda de cobre para vehículos eléctricos alcanzará 1 millón de toneladas en 2023 y aumentará a 2,8 millones para 2030. Esta es una revisión de su pronóstico anterior de 3,2 millones de toneladas para 2030.
No obstante, una mayor participación de mercado de los vehículos eléctricos parece compensar el impacto de la reducción del uso de cobre por unidad. CRU proyecta que para 2030, los vehículos eléctricos y los híbridos enchufables constituirán el 42 % de las ventas mundiales de vehículos, un aumento con respecto a su predicción anterior de un tercio.
Precios cayendo
Edwards de CRU indicó además que los optimistas sobre el cobre podrían haber pasado por alto el potencial de los fabricantes de vehículos eléctricos para introducir tecnologías que reduzcan el uso del metal.
Mientras tanto, el precio de referencia del cobre a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres alcanzó un récord de US$10.845 por tonelada en marzo de 2022, en gran parte debido a las proyecciones optimistas de la demanda de vehículos eléctricos, pero desde entonces ha caído casi una cuarta parte.
Source: https://buystocks.co.uk/news/ev-innovations-may-curb-demand-growth-for-copper/