La mayoría de las acciones estadounidenses están subiendo el jueves después de que la última actualización sobre la inflación reforzó la creencia de Wall Street de que el alivio de las tasas de interés podría llegar tan pronto como en septiembre.
El S&P 500 se mantuvo prácticamente sin cambios en las primeras operaciones cerca de su máximo histórico establecido el día anterior. El compuesto Nasdaq estaba añadiendo un 0,1% a su récord, a las 9:35 am, hora del Este, mientras que el Promedio Industrial Dow Jones cayó 37 puntos, o un 0,1%.
Las acciones que tienden a beneficiarse más de tasas de interés más bajas lideraron el camino, como los constructores de viviendas y los propietarios de bienes raíces. Siete de cada 10 acciones del S&P 500 estaban subiendo, aunque los retrocesos de empresas más grandes e influyentes como Microsoft enmascararon esa fortaleza.
Las empresas más pequeñas que han estado rezagadas con respecto a los gigantes del mercado durante un tiempo también se mostraron fuertes, y el índice Russell 2000 de acciones más pequeñas saltó un 1,8% para liderar el mercado.
La acción fue mucho más fuerte en el mercado de bonos, donde los rendimientos cayeron a medida que los operadores apostaban a que la Reserva Federal comenzaría pronto a reducir su tasa de interés principal. Lleva casi un año en su nivel más alto en más de dos décadas.
Wall Street quiere tasas de interés más bajas porque pueden liberar la presión que se ha acumulado sobre la economía debido a lo caro que se ha vuelto pedir dinero prestado para comprar casas, automóviles o cualquier cosa con tarjetas de crédito. Sin embargo, los funcionarios de la Reserva Federal han dicho que quieren ver “más datos buenos” sobre la inflación antes de apretar el gatillo. Han mantenido las tasas altas para ejercer intencionalmente presión a la baja sobre la economía, con la esperanza de apagar por completo la peor inflación en generaciones.
Wall Street considera que el informe del jueves, que mostró aumentos más leves de lo esperado en los precios de la gasolina, los automóviles y otras cosas que los consumidores estadounidenses compraron durante junio, proporciona precisamente eso.
“Una palabra: fundamental”, dijo Lindsay Rosner, directora de inversiones multisectoriales de Goldman Sachs Asset Management. “Con tres cifras de inflación entre esta mañana y la reunión de la Reserva Federal de septiembre, la cifra de hoy fue crucial para ayudar a la Reserva Federal a ganar confianza en que la inflación sigue avanzando en la dirección correcta”.
Tras la publicación del informe, los rendimientos de los bonos del Tesoro cayeron inmediatamente. El rendimiento del Tesoro a 10 años cayó al 4,19% desde el 4,28% del miércoles por la noche y desde el 4,70% en abril. Se trata de un movimiento importante para el mercado de bonos, y una caída de ese tipo en los rendimientos supone un gran impulso para los precios de las acciones.
El rendimiento de los bonos del Tesoro a dos años, que sigue más de cerca las expectativas de acción de la Fed, bajó a 4,51% desde 4,62% a última hora del miércoles.
Los rendimientos más bajos ayudaron a que la mayor parte del mercado de valores estadounidense subiera. Los propietarios de bienes raíces y las empresas de servicios públicos abrieron el camino porque la caída de los rendimientos hace que sus dividendos relativamente altos parezcan más atractivos para los inversores que buscan ingresos.
Los fideicomisos de inversión inmobiliaria en el S&P 500 subieron un 1,8%, la mayor ganancia con diferencia entre los 11 sectores que componen el índice. Las acciones de servicios públicos ocuparon el segundo mejor lugar en el índice con una ganancia del 0,6%.
Los constructores de viviendas también tenían esperanzas de que las tasas hipotecarias más bajas impulsarían la industria. PulteGroup subió un 4,3% y DR Horton subió un 4%, logrando algunas de las mayores ganancias en el S&P 500.
Además de las esperanzas de próximos recortes en las tasas de interés, las expectativas de un fuerte crecimiento de las ganancias en medio de una economía resiliente pero en desaceleración también han ayudado a impulsar el mercado de valores estadounidense a un récord. Los analistas esperan que las empresas del S&P 500 obtengan su mejor crecimiento en más de dos años en esta próxima temporada de informes, pero está teniendo un comienzo desigual.
Delta Air Lines perdió un 8,1% después de informar ingresos y ganancias para la primavera ligeramente más débiles de lo que esperaban los analistas. La aerolínea dijo que la demanda es fuerte para los viajes de verano, pero también dio un pronóstico de ganancias para el trimestre actual que no cumplió con las estimaciones de Wall Street.
PepsiCo cayó un 1,4% a pesar de superar las previsiones de beneficios para la primavera. Sus ingresos para el último trimestre estuvieron un poco por debajo de las expectativas de los analistas, y el gigante de los alimentos dijo que una importante medida subyacente de ingresos probablemente se ubicará en la parte inferior de su rango pronosticado anteriormente para todo el año.
En el lado ganador estuvo el WD-40, que subió un 1,7% después de reportar ganancias e ingresos más fuertes de lo que esperaban los analistas.
En las bolsas extranjeras, el Nikkei 225 japonés subió un 0,9%, marcando otro máximo histórico.
Los índices también fueron sólidos en gran parte del resto de Asia y Europa.
