Las acciones asiáticas caen a pesar del repunte en Wall Street mientras los inversores esperan los próximos pasos en las guerras comerciales.
Las acciones asiáticas cotizaron en su mayoría a la baja el jueves a pesar de un repunte en Wall Street impulsado por una actualización alentadora sobre los precios al consumidor en Estados Unidos.
Los futuros estadounidenses cayeron y los precios del petróleo se mantuvieron prácticamente sin cambios.
Los mercados chinos cayeron mientras los inversores aguardaban los próximos pasos en la guerra comercial del presidente Donald Trump. El índice Hang Seng de Hong Kong cayó un 0,7%, hasta los 23.426,80 puntos, mientras que el índice compuesto de Shanghái retrocedió un 0,4%, hasta los 3.357,02 puntos.
El Nikkei 225 de Tokio ganó un 0,5% a 37.014,82 puntos.
El Kospi de Corea del Sur bajó un 0,1%, hasta los 2.573,05 puntos. En Australia, el S&P/ASX 200 bajó un 0,4%, hasta los 7.756,10 puntos.
El Taiex de Taiwán cayó un 0,4% y el Sensex de India subió un 0,1%. El SET de Bangkok bajó un 0,1%.
El miércoles, el S&P 500 avanzó un 0,5% hasta los 5.599,30 puntos, tras oscilar entre una ganancia inicial del 1,3% y una pérdida posterior. Esta jornada de negociación inestable se produjo un día después de que el índice cayera brevemente más del 10% por debajo de su máximo histórico alcanzado el mes pasado.
El Promedio Industrial Dow Jones también registró una fuerte caída antes de cerrar con una pérdida del 0,2%, situándose en 41.350,93. El Nasdaq Composite subió un 1,2%, hasta los 17.648,45.
El informe de inflación mostró que los precios generales aumentaron menos para los consumidores estadounidenses el mes pasado de lo que esperaban los economistas.
Las empresas de la industria de inteligencia artificial lideraron las ganancias, recuperándose después de que las acciones de IA se desplomaran recientemente por las preocupaciones de que sus precios se habían vuelto demasiado estratosféricos.
Nvidia subió un 6,4%, recortando sus pérdidas del año hasta el 13,8%. El fabricante de servidores Super Micro Computer subió un 4%, y GE Vernova, que impulsa los centros de datos de IA, ganó un 5,1%.
El Tesla de Elon Musk, cuyo precio se había reducido a más de la mitad desde mediados de diciembre, subió un 7,6%, su primera ganancia consecutiva en casi un mes.
Pero fueron más las acciones del S&P 500 que cayeron que las que subieron. Entre las más afectadas se encontraban las empresas que podrían verse perjudicadas por la guerra comercial de Trump.
Brown-Forman, la compañía detrás del whisky Jack Daniel’s, cayó un 5,1% y Harley-Davidson se hundió un 5,7%.
El bourbon estadounidense y las motocicletas se encuentran entre los productos a los que la Unión Europea está aplicando aranceles propios. Estas medidas responden a los aranceles del 25% que Trump impuso al acero y al aluminio, que entraron en vigor ese mismo día.
Canadá también contraatacó con aranceles anunciados sobre herramientas, equipos deportivos y otros productos estadounidenses.
«Lamentamos profundamente esta medida», declaró la presidenta de la Unión Europea, Ursula von der Leyen. «Los aranceles son impuestos. Son perjudiciales para las empresas y peores para los consumidores».
La pregunta que pesa sobre Wall Street es cuánto dolor permitirá Trump que sufra la economía a través de aranceles y otras políticas.
Incluso si Trump finalmente opta por aranceles más suaves, aún podría haber daños. El vertiginoso aluvión de anuncios intermitentes sobre aranceles ya ha comenzado a minar la confianza de los consumidores y las empresas estadounidenses, aumentando la incertidumbre. Esto podría provocar que los hogares y las empresas estadounidenses gasten menos, perjudicando así la economía.
El martes, por ejemplo, Trump dijo que duplicaría los aranceles del 25% anunciados sobre el acero y el aluminio canadienses, sólo para retractarse más tarde ese mismo día después de que una provincia canadiense se comprometiera a abandonar una medida de represalia que había indignado a Trump.
Varias empresas estadounidenses han dicho que ya han comenzado a ver un cambio de comportamiento entre sus clientes.
Delta Air Lines se hundió un 3% para agravar su caída del 7,3% respecto del día anterior, cuando la aerolínea dijo que está viendo que la demanda de reservas cercanas para sus vuelos se debilita.
Casey’s General Stores, la empresa con sede en Ankeny, Iowa, que gestiona cerca de 2900 tiendas de conveniencia en 20 estados, ofreció un buen resultado. Sus acciones subieron un 6,2% tras reportar ganancias e ingresos superiores a los esperados por los analistas en el último trimestre, gracias en parte al buen desempeño de las ventas de sándwiches calientes y combustible. Además, mantuvo estable su pronóstico de ingresos para este año.
El informe de inflación del miércoles se conoció en un momento en que aumentan las preocupaciones de que los aranceles de Trump harán subir aún más los precios a medida que los importadores estadounidenses trasladan sus costos a sus clientes.
También es útil para la Reserva Federal, que había estado recortando las tasas de interés el año pasado para impulsar la economía antes de hacer una pausa este año, en parte debido a las preocupaciones sobre una inflación obstinadamente alta.
En otras operaciones realizadas la madrugada del jueves, el crudo estadounidense de referencia perdió 11 centavos, hasta los 67,57 dólares por barril. El crudo Brent, el referencial internacional, cedió 5 centavos, hasta los 70,90 dólares por barril.
El dólar estadounidense cayó de 148,25 a 147,88 yenes japoneses. El euro subió de 1,0887 a 1,0889 dólares.